Además alejándolo del suelo se evita que la humedad genere oxido y este termine afectando su estructura, entonces favorece su conservación en el tiempo.

La fuerza estructural de un contenedor está basada en la rigidez de los cuatro pilares de acero que componen sus esquinas, estos pueden soportan muchas toneladas de peso brindándole la capacidad de apilar varias unidades cargadas, es por eso que apoyando las 4 esquinas es suficiente para darle sustento. Solo como un resguardo adicional se recomienda agregar uno o más puntos de apoyo extra en los extremos del centro del contenedor (generalmente en contenedores de 40 pies), sobre todo cuando este quedará fijo para usarse como base para una vivienda.

Las medidas básicas para el cimiento es un cubo de 40 x 40 cm, con eso es suficiente por ejemplo para ocupar el container como bodega. La altura de los pilares puede variar según las condiciones del terreno (ver foto) o por gusto personal, podrían llegar a requerir mayor profundidad y barras de metal para mejorar su estructura y capacidad de carga. Además pueden soldarse al contenedor como un resguardo adicional.

Importante

• Sacar niveles para que el contenedor no quede inclinado y el peso se reparta de forma pareja.

• Los apoyos tiene que estar perfectamente alineados unos con otros a 90° para crear un rectángulo perfecto.

• Para comprobar si está recto, mida de esquina a esquina en diagonal: la medida debe ser la misma.